Jiutepec

Información

Jiutepec

Información sobre Jiutepec

Iglesia de JiutepecEl mapa de la República Mexicana señala que el municipio de Jiutepec se encuentra en el estado de Morelos y territorialmente presenta colindancias al norte con los municipios de Tepoztlán y Cuernavaca, en la zona oriente con Yautepec, al sur con Emiliano Zapata y al poniente nuevamente con Cuernavaca y también con el municipio de Temixco. En otros datos, dicho municipio está constituido por una superficie territorial total de unos 70.45 kilómetros cuadrados y se encuentra a una altura promedio de 1,350 metros sobre el nivel del mar.

Geográficamente de acuerdo a la ubicación territorial que tiene Jiutepec, se localiza entre los paralelos 18° 53' latitud norte y los meridianos 99° 10' longitud oeste, respecto al meridiano de Greenwich. Entre otra información importante, de acuerdo a los resultados que se obtuvieron del tercer censo de población que el INEGI realizó en el año 2010, el número total de personas que habitan en el municipio de Jiutepec es de 196,861.

Sitio Web del municipio de Jiutepec, Morelos.

Historia

Historia de Jiutepec

El municipio de Jiutepec cuenta con una historia interesante debido a que es una zona que desde sus inicios se ha caracterizado por tener amplios recursos naturales como por ejemplo abundancia de agua. Los primeros pobladores que llegaron a dicho lugar nos permite remontarnos a muchas épocas pasadas, cuando el hombre se dedicaba a la caza de mamuts y a la recolección de frutas y semillas para sobrevivir. Después se dio la fertilidad de la tierra, aunado al característico clima de la región, mismo que desde siempre ha permitido la agricultura. Con el paso del tiempo llegaron los tlahuicas a Jiutepec, además de los popolocas, mixtecos, matlatzinca y ocuitecos.

En los siglos XII y XIII fue cuando llegaron las tribus que hablaban náhuatl y que habían salido de Chekume ustutl que es "Chicomostoc", siendo ellos quienes poco después formaron importantes señoríos como el Xiutépetl. Es elemental señalar que eran muchas las tribus y personas que tenían grandes intereses por por dominar los señoríos tlahuicas y un ejemplo de esto fueron los aztecas, debido a que los tlahuicas se dedicaban a cultivar el algodón, además del gran talento que tenían para tejer diversas variedades de telas y prendas de vestir. Los poblados que estaban bajo el poder de Cuauhnahuac, nombre antiguo que tuvo la ciudad de Cuernavaca y el que resalta fue Xiutépetl, considerados como los mejores artesanos para la elaboración de prendas, en donde el tejido y los tintes que se utilizaban tenían calidad y eran reconocidos como uno de los mejores de la época.

De la misma forma, la zona comenzó a ser popular al producirse el arte plumario, en especial los trajes de guerrero, debido a que los aztecas exigían la realización de estas actividades como parte de un tributo. Fue así como este poblado comenzó a crecer en muchos aspectos, logrando desarrollarse con el paso de los años. La historia también señala que cuando llegaron los españoles al territorio nacional, la población que vivía en lo que hoy es Morelos, se calculaba de 800,000 habitantes en total. Fue entonces cuando Hernán Cortés tuvo interés en al zona, considerándolo de gran importancia, por lo que logró conquitar las tierras que se encontraban alrededor del Tenochtitlán, que era el asiento del poder mexica.

Cortés se puso especial cuidado a la región porque sabía que era muy importante en ese entonces, en donde resaltó el aspecto de tener una estrategia militar seguida por los castellanos y a su riqueza, lo cual se basó en los productos agrícolas que eran mandados a los tenochcas. Fue entonces el 11 de abril del año 1521 cuando Jiutepec poseía una gran concentración de tropas que esperaban a Cortés para enfrentársele, lo cual se planeó por motivos e intereses de esas personas, sin embargo fueron derrotados por Cortés. Cuando la conquista militar finalizó, las tierras de la mayor parte del actual Morelos le fueron dadas a Hernán Cortés, quien inmediatamente las integró al Marquesado del Valle de Oaxaca, entre las cuales se encontraba Jiutepec.

Durante la época colonial se continuó destacando la grandeza natural de Jiutepec y de otras partes del estado de Morelos, haciendo que la fertilidad de sus tierras, la abundancia de agua y la disponibilidad de mano de obra fueron piezas claves para que más personas se interesaran en la región, siendo así cuando se asentaron en dicha región cuatro haciendas, las cuales fueron: San Gaspar, Atlacomulco, Dolores y San Vicente, además de varios trapiches como el de Asesetle. Sin embargo durante los siglos XVI y XVII muchas personas habían muerto y muchas otras salieron de la región para ir a otros lugares, motivo por el cual desaparecieron diversos poblados y varios parajes quedaron despoblados, esto provocó que muchas tierras de Jiutepec quedaran sin cultivar, esto permitió una primera expansión de las haciendas y también hizo que los propietarios se vieran obligados a importar mano de obra de los esclavos.

Debido a lo anterior, la historia señala que fue así como se comenzó a formar una sociedad mestiza, misma que se formó por los negra, indígenas, criollos y mestizos, quienes estos últimos eran los administradores. Las haciendas que se habían construido anteriormente, estaban muy cerca de los poblados de la región, en donde Jiutepec comenzó a ser más mestiza que otros lugares del país. En el siglo XIX se destaron muchos conflictos entre los pueblos y las haciendas debido al uso del agua y a las tierras que sembraban, debido a estos motivos, los habitantes de algunos pueblos delimitaron algunas estrategias, como por ejemplo rehacer su historia. Sin embargo, los conflictos se hicieron más grandes con el tiempo, en donde el municipio de Jiutepec fue uno de los principales escenarios del bandolerismo social representado por los plateados.

Se dio la presión de la hacienda de San Vicente sobre las tierras de Amatitlán, lo cual hizo que los habitantes de la zona tuvieran que irse cerca de Cuernavaca en busca de otra zona para establecerse. Fue así como en el año de 1852 se facultó al gobernador del Estado de México para aprobar la enajenación de terrenos de Jiutepec en favor de la hacienda de Atlacomulco. Cabe decir que aún con lo que había pasado, en el siglo XX se agudizaron los diversos conflictos que desde mucho tiempo atrás existían, lo cual condujo a la Revolución de 1910, en donde los pobladores del municipio de Jiutepec participaron enfrentándose a otros. En la región de Texcal se realizaron varios enfrentamientos sangrientos, debido a que era considerado como un lugar adecuada para emboscar a las fuerzas federales, además de que servía de refugio a las familias en las cuevas existentes.

Fue así como el Texcal fue considerado como un centro estratégico de operaciones del general Amador Salazar, desde donde se planearon y realizaron varios ataques en contra de las tropas federales, como por ejemplo los combates en donde participaron 160 zapatistas que se posesionaron del Ojo de Agua en Tejalpa el 12 de abril de 1913, en donde las tropas federales lograr repeler el ataque, con lo cual después se retiraron los rebeldes al Texcal. Pero esto no fue el fin, sino que al día siguiente, los rebeldes volvieron al Ojo de Agua con el capitán Martínez al mando, quienes salieron para combatirlos, haciendo que se dieron muchos tiroteos en la hacienda de La Soledad. En Telajapa se hizo otro combate en contra de otros rebeldes que ocupaban dicha zona pero debido a que tenían más personas armadas, decidió retirarse a Jiutepec. Con esto se puede ver cómo los habitantes de cada poblado siempre defendieron su autonomía y sus tierras, luchando contra los que querían quitarselas y someterlos.

Los ataques que se dieron entre las personas, provocaron que después Jiutepec fuera quemado varias veces como motivo de represalias por parte de las tropas federales. Muchas personas murieron debido a todo lo sucedido, en donde debido a la naturaleza de la región, los incendios fueron debastadores debido a la abundancia de árboles, de tecorrales, barrancas y apantles. En 1916 los federales hicieron una masacre en Jiutepec, cuya tropa fue dirigida por el general carrancista Rafael Cepeda, quien reunió a 225 prisioneros y poco después los fusiló. En el año de 1914 la hacienda de Atlacomulco funcionó como cuartel general del ejército libertador durante el sitio que se puso en la ciudad de Cuernavaca, en donde también se dieron cosas muy sangrientas contra las personas.

Mucho tiempo después, los pueblos recuperaron parte de su autonomía y siguieron gobernados según sus usos y costumbres, lo cual es algo muy tradicional en todo el país y que en la actualidad continúa este aspecto importante en muchos poblados. Cabe decir que de acuerdo a la historia, los revolucionarios comenzaron a ocupar muchos lugares, siendo así como fue reconfigurado el poder político del Estado de Morelos. Se realizó una reforma agraria en donde desapareció el sistema de haciendas, además de otras medidas políticas. Fue por este motivo que los reales de hacienda adquirieron la categoría de congregaciones con la finalidad de que sus habitantes, quienes eran los antiguos peones, tuvieran autoridades que pudieran hacer solicitudes de ejidos. Fue de esta forma como el 31 de julio de 1932 se dio el cambio de categoría de población el real de San Antonio Atlacomulco y el 10 de septiembre se elevó a la categoría de congregación al real de San Gaspar.

Un hecho histórico importante fue el 15 de diciembre de 1932 cuuando se les dio denominación oficial a algunas poblaciones para clasificarlos como ayudantías, además de que se prohibió el uso de denominaciones religiosas, fue así como a San Gaspar se le puso el nombre de Cliserio Alanís. En esta misma fecha se separaron de Jiutepec las población de San Francisco Zacualpan, Acatlipa, Zacualpan, Tepetzigo, Tetecalita y Tezoyuca, mismas que después dieron nacimienot al municipio de Emiliano Zapata. El 3 de marzo de 1933 se segregó de Jiutepec el viejo real de Temixco para formar el municipio del mismo nombre. En marzo de 1934 un grupo de ejidatarios de San Gaspar se enccargó de colonizar la colonia Progreso.

La historia también muestra que durante la década de los 30's se fundó la colonia agrícola militar de José G. Parres con personas de la tercera edad. En el año de 1966 se asentó en la región el municipio la Ciudad Industrial del Valle de Cuernavaca, conocido por sus siglas "CIVAC", el cual es parte de un desarrollo industrial que por muchas personas es considerado como ajeno a la realidad que se vivie en Jiutepec, en donde no todo está relacionado con las grandes fábricas. Sin embargo, la construcción de las industrias logró atraer a un gran número de personas de los estados vecinos, pero se instalaron de manera ilegal en los terrenos ejidales y comunales de los poblados a donde llegaban. Fue así como una zona que comenzó con pocos habitantes, logró crecer con el tiempo hasta convertirse en lo que es actualmente, un lugar para vivir, para trabajar y desarrollarse en muchos aspectos de la vida humana y social, siendo Jiutepec un municipio digno de ser visitado por las personas.

Atracciones

Atracciones en Jiutepec

El municipio de Jiutepec cuenta con varias zonas que son parte de su atractivo tanto histórico, como cultural, social, religioso y turístico. Entre las zonas y edificaciones más importantes se encuentra el Exconvento Franciscano que fue construído en el siglo XVI, mismo que también se le conoce popularmente como la Parroquia de Santiago Apóstol. La historia señala que se construyó a principios del año de 1525 y se finalizó en 1529. Dicha edificación es una clara muestra de cómo la religión formó parte esencial de la región, en donde los franciscanos formaron parte de una orden religiosa católica que se fundó por San Francisco de Asís en el año 1209.

Los franciscanos se componen de primera, segunda y tercera orden y fueron ellos quienes construyeron muchas iglesias, templos y conventos para hacer edificaciones especiales de la religión mencionada con la finalidad de hacer que las personas se acercaran a dios y a los santos, ofreciéndoles servicios religiosos muy variados. La parroquia de Santiafo Apóstol es una construcción sencilla pero está llena de grandes detalles y de tonalidades muy algres. En su parte interior se pueden apreciar varias imágenes religiosas, junto con una gran riqueza artística destacando un retablo de estilo barroco que fue hecho en el siglo XVIII, además de otros cinco con un estilo neoclásico.

Debido a que el paso del tiempo desgasta las cosas, en el año de 1998, dicha parroquia fue restaurada para tratar de conservar los detalles originales de la construcción, siendo ésta una forma de continuar preservando lo que hace siglos se realizó con la intención de ofrecer un recinto especial para dios, los santos y las personas débotas del catolicismo. Es elemental señalar que dicha parroquia es considerada como una de las más atractivas en Jiutepec, es la segunda que se construyó en el estado de Morelos. Además, es necesario señalar que en el claustro de dos niveles se encuentran restos de pintura en los muros y una fuente en el centro, también tiene la imagen de un Cristo Negro llamado "el señor de la columna". Debido a la popularidad de la parroquia y del santo, cuando es semana santa se realizan procesiones con el Cristo articulado del siglo XVIII.

Otra de las edificación más importantes en la región se encuentra en Atlacomulco, en donde está la Hacienda de Cortés, la cual también se le conoce como "San Antonio Atlacomulco", misma que forma una referencia histórica en el estado de Morelos. En el edificio actual se conservan diversos elementos arquitectónicos originales de la hacienda, en donde actualmente funciona como un hotel, además de que aún existe la capilla que se mantiene abierta al público. Esta hacienda tiene un estilo barroco y la historia que está detrás de ella es realmente muy interesante, lo que nos permite remontarnos al año de 1529 cuando a Hernán Cortés se le dio el título de "Marqués del Valle de Oaxaca", con lo que logró tomar posesión de las tierras dentro del propio marquesado.

Fue de esta forma como mejor conocido como "el conquistador"  instaló el segundo ingenio que se fundó en la Nueva España, siendo uno de los más poderosos de la época del virreinato, en donde resalta su llegada a la Hacienda de San Antonio Atlacomulco, que es popularmente conocida como Hacienda de Cortés. Su fundación se dio en 1542, en donde se realizó la simbre de la caña de azúcar, usando los manantiales de Chapultepec para llevar a cabo tal fin de forma adecuada. Debido a la gran distancia que existía entre Chapultepec y San Antonio Atlacomulco, fue necesario construir un acueducto de 1680 metros. La hacienda se construyó en grandes terrenos, por lo tanto desde sus inicios fue un lugar esplendoroso, con grandes instalaciones y con un gran acueducto.

Debido a que en sus terrenos se realizaba la siembra de la caña de azúcar, para transportar la producción se inició haciéndolo a lomo de bestias de carga hasta el ingenio de Tlaltenango, donde se realizaba el proceso de fabricación del azúcar. Cabe señalar que la importancia de las haciendas en épocas pasadas fue mucha y precisamente cuando se construyó la de Hernán Cortés, comenzaron a formarse más comunidades alrededor de ésta, cabe decir que debido a las arduas jornadas de trabajo en la hacienda, los habitantes de la zona no querían trabajar de forma continua, lo cual provocó que se comenzaran a introducir de las Antillas esclavos de procedencia de África, haciendo que poco a poco se comenzaran a mezclar con los indígenas, con lo que se dio el origen de una nueva casta en la Nueva España, lo que ahora es México.

Debido a que Hernán Cortés heredó en el año de 1640 por doña Juana de Aragón Pignatelli, ella decidió mudarse a la hacienda de San Antonio Atlacomulco en el año de 1642 junto con Cortés, con lo que inció una nueva historia en dicho lugar. Después de que se dio la consumación de la independencia de México, Lucas Alemán fue quien se hizo cargo de la administración del marquesado. Poco después de la Revolución Mexicana, la propiedad fue repartida entre los ejidos de Jiutepec, Tejalpa, Acapatzingo, Chapultepec, Atlacomulco y la colonia de José. G. Parres. En 1930 la hacienda fue descudidada y abandonada completamente.

Fue así como años más tarde, la hacienda fue adquirida por una persona con poder, quien poco después la convirtió en un hotel, mejorándolo y haciendo que sus elementos originales se conservaran. La historia también señala que en dicho hotel se recibió a la última heredera del Marquesado del Valle de Oaxaca, de nombre María Gloria Pignatelli Monteleone Cortés. El hotel forma parte elemental en todo el estado de Morelos, al ser un lugar con una grandiosa riqueza natural, histórica, cultural, arquitectónica y social desde siglos pasados hasta la actualidad.

Otras edificaciones que forman parte de los atractivos que hay en Jiutepec, se encuentran ubicadas en Tejalpa, las cuales son: Las Capillas de San Miguel, San Pedro y la Parroquia de la Asunción, mismas que formaron parte esencial de la región debido a que formaron parte de una solución arquitectónica que fueron construídas por los franciscanos en la época del Virreinato de Nueva España. Esto se hizo con la finalidad de evangelizar a los habitantes de la zona después de que se dio la Conquista del país. Otra edificación de gran atracción es la Ex Hacienda de San Gaspar que está ubicada en la colonia agrícola de Cliserio Alanís, la cual  dejó de funcionar después de que se dio la Revolución Mexicana. Actualmente dicha ex hacienda es propiedad privada y conserva muchos elementos originales en un sentido estético y aún se conserva la capilla.

Economía

Economía de Jiutepec

La economía del municipio de Jiutepec está basada en diversas actividades consideradas como primarias, debido a la importancia que tienen en su realización, entre las cuales se encuentra la industrial y se debe a que en dicho lugar existen una gran cantidad de industrias, teniendo alrededor de 250 plantas de todo tipo. En Jiutepec se encuentra la Ciudad Industrial del Valle de Cuernavaca, conocida por sus siglas "CIVAC", en donde se encuentran muchas fábricas, mismas que han logrado impulsar la economía de la región y del estado en general, entre las que destacan están el armado de vehículos, asientos para automóviles, elaboración de productos relacionados con la industria farmacéutica y más. También se encuentran las actividades relacionadas con la extracción de cal y tezontle.

Cabe decir que otra de las actividades que más se practican en Jiutepec es la agropecuaria, en donde se llegan a cultivar cerca de 500 hectáreas, en donde los productos principales  son los viveros y cultivos a base de riego, se exporta flor de todo tipo, en donde destaca la flor de nochebuena, misma que se lleva a otras partes del país. Con el paso de los años, Jiutepec se ha logrado ir desarrollando, en donde la mayoría de sus habitantes son considerados como economómicamente activos.  Se debe destacar que en Jiutepec está el hotel "Camino Real" y el de "Sumiya", este segundo con un estilo Japones con un teatro Burkina original que fue traído de Japón, siendo dos ejemplos de atracción turística en dicho lugar, lo cual también ha hecho que más personas que beneficien con los trabajos que se ofrecen en esos lugares.

Tiempo

Tiempo en Jiutepec

La ubicación gográfica que tiene el municipio de Jiutepec, hace que el clima que predomina en la zona sea subtropical y caluroso, presentando lluvias en la época de verano. De acuerdo a los registros obtenidos de años pasados, se puede ver que la temperatura promedio anual que presenta es de aproximadamente 21,2°C, con una variante media máxima que es 31.4°C, mienstras que la temperatura máxima es de 39.8 °C, en donde la mínima media baja es 10.8 °C y la mínima absoluta 0.5 °C. Ante este tipo de clima, se puede decir que los meses más calurosos son abril y mayo, mientras que los más fríos son los de diciembre y enero. Los meses en donde se presentan más los días lluviosos son julio y agosto, con aproximadamente 80 días nublados al año.

Es elemental señalar que de acuerdo a las temperaturas y las condiciones climatológicas, la precipitación media anual es de 1,021 milímetros, haciendo que la época de lluvias se presente en el mes de junio a octubre, siendo cuando se alcanzan 890 milímetros, con un volumen de lluvia de 59,334,890 metros cúbicos. Es así como el municipio de Jiutepec es considerado como uno de los lugares que poseen un mejor clima en comparación con otros municipios del estado de Morelos, por lo tanto debe destacarse que el clima puede llegar a presentar algunas variaciones en años diferentes pero siempre se mantiene de la misma manera.

'